lunes, 30 de diciembre de 2019

La inestabilidad típica



Nuestra civilización es inestable.  Si midiéramos la probabilidad de que la civilización se extinga[1] durante el siguiente siglo, entonces esta probabilidad es hoy mayor que hace miles de años atrás.

Esto es muy curioso porque la civilización actual ha mejorado todos los números. La esperanza de vida mejoró, los nacimientos exitosos mejoraron, el estándar de vida mejoró, la pobreza disminuyó, la producción de alimentos aumentó. ¿Por qué decimos que ahora sus probabilidades de extinguirse son mayores que antes?

Si revisamos un poco nos damos cuenta del problema. En el pasado,  2.000 o 3.000 años atrás, las posibilidades de que nuestra civilización se extinga durante el siguiente siglo dependían casi exclusivamente de la colisión de un gran meteorito contra la Tierra. En el presente, el evento es el mismo, las posibilidades de que ocurra son más o menos las mismas, pero se ha agregado un episodio nuevo muy negro, que ahora está y antes no estaba: La detonación de todo el armamento nuclear existente.

Al respecto hay varias cosas que decir.
1. Si se detonan todas las armas nucleares, se extingue la civilización. Esto se mostró en varios artículos, viendo el modo como se comportaba el clima en dicho escenario.
2. La probabilidad de que todo el armamento detone en el siguiente siglo, es mayor que la probabilidad de que caiga un meteorito en el siguiente siglo y extinga la civilización. Y la probabilidad de que ocurra una cosa o la otra, es aún mayor. Esa es la probabilidad actual.
3. La probabilidad de detonación de armas nucleares aumenta con el tiempo: La probabilidad de que aparezca un loco es menor en 100 años que en 200 y aún menor que en 500. En 1.000 años, la probabilidad es alta.
4. La cantidad de armas nucleares tiende a aumentar con el tiempo y la cantidad de países con armas nucleares también tiende a aumentar.
5. Los tratados de no proliferación son inestables: Los actores más peligrosos se pueden ir del acuerdo en muy poco tiempo.


Es un hecho consistente (aunque no evidente) que nuestra civilización está atravesando en la actualidad un período inestable. Pero ¿qué es lo que genera esa inestabilidad?
La respuesta es simple: La tecnología. Lo que existe ahora y no existía antes es nuestro conocimiento y nuestra capacidad para arrancar la energía de los átomos. Y este conocimiento nuevo genera una responsabilidad y un cuidado nuevos que aun no hemos construido. La inestabilidad la genera esta simbiosis entre la civilización y su tecnología.

La pregunta no es ingenua, como lo demuestra esta otra: ¿Es este choque un fenómeno especial de nuestra civilización o es común a todas las civilizaciones inteligentes cuya evolución imaginemos? ¿Debemos esperar que todas las civilizaciones  desarrollen tecnología hasta tener que adaptarse a ella en algún punto?

Si la respuesta fuera afirmativa, entonces estaríamos frente a una inestabilidad presente en la historia evolutiva de toda civilización que no se extinga frente a ella. Entonces, todas las civilizaciones tecnológicas ya estabilizadas tendrían rasgos en común, como por ejemplo, el conocimiento para arrancar energía de los átomos, entre muchos otros.

Pero además, si una civilización se adapta a sí misma y logra perdurar unos miles de años después de la adaptación ¿Qué cosas podrían matarla en el futuro? ¿Cuál sería su longevidad?
Siempre quedan preguntas por responder.




[1] La extinción de la civilización (con supervivencia de la especie inteligente) debe definirse con cuidado. Implica al menos una dramática reducción de la población y el conocimiento.

jueves, 26 de diciembre de 2019

Probabilidad de Civilizaciones Inteligentes en la Vía Láctea



Es muy común pensar que el supuesto de que existe vida inteligente en otros sitios de la galaxia es muy riesgoso dado que no existen evidencias de estas civilizaciones. Pero la situación real es completamente distinta.
Suponer que somos un caso único de vida inteligente, dadas las evidencias de que nosotros existimos y de que hay cientos de miles de millones de planetas en nuestra galaxia, sí es un supuesto riesgoso. Muy riesgoso.

Hagamos un experimento imaginario aumentando progresivamente el número de planetas que tiene la galaxia. El objetivo es que lo comprendan todos, de modo que iremos despacio y desatendiendo detalles.


Si nuestra galaxia tiene solamente tres mundos (n=3): el nuestro, al que llamaremos T, el mundo A y el mundo B, y anotamos  "1 " cada vez que un mundo tiene vida inteligente y "0" cuando no la tiene; los casos en nuestra galaxia serían los siguientes:

    
      T A B
1.   0 0 0
2.   0 0 1
3.   0 1 0
4.   0 1 1
5.   1 0 0
6.   1 0 1
7.   1 1 0
8.   1 1 1


Donde anotamos el número de caso a la izquierda y el nombre de cada mundo, arriba. 

p(3)=1/(2^3)

Existe una probabilidad de 1/8 = 0,125 de que nuestro mundo tenga vida inteligente y el resto no.


En una galaxia de 3 mundos, el caso en que nuestro mundo tiene vida y los demás no, es el caso 5, y es un caso entre 8 posibles. Su probabilidad de ocurrencia es 1/8, esto es


Si nuestra galaxia tiene ahora n = cuatro mundos: el nuestro, al que nuevamente llamaremos T, el mundo A, el mundo B y el mundo C, y anotamos  "1"  y "0" como antes; los casos en nuestra galaxia serían los siguientes:



     T A B C
1.   0 0 0 0
2.   0 0 0 1
3.   0 0 1 0
4.   0 0 1 1
5.   0 1 0 0
6.   0 1 0 1
7.   0 1 1 0
8.   0 1 1 1
9.   1 0 0 0
10. 1 0 0 1
11. 1 0 1 0
12. 1 0 1 1
13. 1 0 1 1
14. 1 1 0 1
15. 1 1 1 0
16. 1 1 1 1

En una galaxia de 4 mundos, el caso en que nuestro mundo tiene vida y los demás mundos no, es el caso 9 de la lista, y es un caso entre 16 posibles. Su probabilidad de ocurrencia sería 1/16, esto es 

p(4)=1/(2^4)

donde p(4) es ahora la probabilidad de que nuestro mundo tenga vida y los demás no, en una galaxia de 4 mundos.

Queda claro que su hubiera 5 mundos en nuestra galaxia, la probabilidad de que solo el nuestro tuviera vida sería de

p(5)=1/(2^5)

Y en general, en una galaxia de n mundos, diríamos que la probabilidad de que nuestro mundo tenga vida y los demás no es de

p(n)=1/(2^n)

Pero el caso real es que nuestra galaxia tiene tal vez entre 200.000 y 400.000 millones de mundos. Tomenos 200.000 millones para hacer la cuenta. La probabilidad de que  nuestro mundo tenga vida y todos los demás no la tengan, es 
p(200.000.000.000) = 1/(2^200.000.000.000)


Un número tan astronómicamente bajo nos dice que en nuestra galaxia existen varios mundos habitados. Suponer que solo nuestro mundo está habitado y los otros no, es suponer que se ha dado un caso cuya probabilidad de ocurrir es de una entre dos a la docientos mil millones. Una probabilidad tan baja es tratada por la ciencia como si fuera nula.
Cuando decimos que existen otras inteligencias en nuestra galaxia, estamos diciendo algo cuya probabilidad de ocurrir es prácticamente 1.


Nota1. Los fenómenos considerados son independientes. La probabilidad de que un planeta genere vida inteligente es independiente de la probabilidad de que ocurra en otro planeta.
Nota2. En este tipo de calculo se considera que la probabilidad  de que un mundo produzca vida inteligente es igual a la probabilidad de que no la produzca, porque ambas situaciones se cuentan como un caso. Para resolver esto hay que complicar la cuenta considerando dos probabilidades complementarias p y q. Pero si queremos respetar la evidencia de un mundo habitado en una galaxia deshabitada, habría que reducir casi a cero la probabilidad  de ocurrencia de vida en un mundo y estaríamos casi en la misma situación. 

Humanidad vs. medio ambiente: Radiografía de un choque

Single mask on grass and dirt. ( Alisa Singer ) La mejor forma de evaluar el presente de nuestra civilización es comprendiendo cómo ha varia...